Pittsburgh Steelers

A falta de tres minutos, la defensa de Pittsburgh aprovechó un regalo de Carr tremendo, y el partido se ponía 21-7. Y aunque el partido parecía decidido, los pases a los TEs penalizaban con 8 puntos a Steelers, por lo que Carr debía anotar un TD si quería ganar el partido. Este cumplió con su deber, pero Jankilowski fallaba el extra point, y el partido se quedó con el 21-13 final.



El último drive, Roethlisberger solo tenía que conectar un pase con un WR, y así lo hizo para asegurarse un partido, cuyo marcador refleja 21-13 (aunque las penalizaciones resten puntos a Steelers).



Estadísiticas:





Pittsburgh realizó 9 pases, siendo 4 de ellos a los WR, incumpliendo así la regla del 50%.

En partidos contra los equipos del HC Weedson cualquier error se paga, y tres turnovers de Steelers (siendo uno de ellos en el goal-line rival, ocasionando un pick-6) son muchos.

Aún así el partido estuvo pendiente de un hilo hasta los segundos finales, cuando Big Ben se plantó en la red zone de Tampa, pero no pudo convertir la oportunidad en un touchdown que hubiese empatado el partido.

Ninguno de los dos equipos incumplió la regla del 50% de pases a TE/RB.

Un placer como siempre, Rafa!

No fue un partido bueno para la ofensiva de Steelers. Con Bryant fuera del equipo por decisión técnica, Brown no tuvo su día, y sólo Wheaton (el WR3) dio la talla en el cuerpo de receptores. Por su lado, Bell fue añadiendo yardas, aunque esta vez no pudo abrir tanta brecha como en el partido anterior.

En general, los Ravens plantearon un partido muy serio, y prueba de ello fue el resultado con el que nos fuimos al descanso (21-9). La segunda parte, y pese a arriesgar lo justo, fue una pesadilla para Flacco puesto que se aferró a la pelota demasiadas veces ante la presión de Pittsburgh. Ello costó fumbles fatales para las aspiraciones de los cuervos de Baltimore, ya que la ofensiva local no llegaba a materializar las oportunidades que tenían.

Aún así, el partido se decidió a falta de dos minutos y medio para la finalización, gracias a un pase interceptado (no atrapado por el receptor de Baltimore, mejor dicho), que fue retornado para conseguir el resultado final de 21-22.

Resumiendo, podemos decir que Ravens pudo ganar por los grandes pases de su QB, pero que perdió por no deshacerse de la pelota cuando tocaba, y por un pase muy impreciso en el momento menos oportuno.

Por el lado local, Steelers deben pensar mucho acerca del pésimo partido que realizaron y que por suerte acabaron llevándose.

El escenario era el ideal: se jugaba en casa, el equipo se sitúa en la segunda posición de la tabla, y venía un rival sin sus grandes estrellas. Ni más ni menos, Giants no podía contar con Eli Manning ni con OBJ.

Aún así, los acereros se dispararon en el pie varias veces jugando al ataque, y la defensa no pudo parar a Victor Cruz, que se marcó recepciones vitales para que su equipo avanzara por el campo. Ni con un QB de pacotilla como Nassib, los de Pittsburgh pudieron parar bien al ataque visitante, aunque lo más preocupante fue la falta de ideas de Big Ben.

No fue un partido bonito, ya que ambos QB jugaron de pena, pero el resultado es totalmente justo.

Aquí dejo las stats:

Nadie incumplió la regla del 50%

No hay palabras para describir lo visto hoy en el Heinz Stadium. Los 9 puntos de Steelers vineron de un pick-6 de la defensa, y un safety del equipo rival: toda una señal del pésimo partido de los acereros contra unos Saints, que demostraron porqué son dignos subcampeones.

Big Ben se fue a casa con varios moratones, y fue un milagro que no se lesionara en uno de los 8 sacks recibidos. El QB local no se sintió nunca cómodo y eso hizo resentir la ofensiva.

A continuación las stats:

Nadie incumplió la regla del 50%