Descalabro monumental en el debut mundialistico. No es que suiza tuviera amplias aspiraciones de triunfo en el campeonato, pero se esperaba mucho más de este equipo frente a una en principio débil Japón. Partido dominado de cabo a rabo por los orientales y en el que cabe destacar una figura por encima de las demas, el portero de los Ducks, Jones Hiller, la estrella suiza, que protagonizó uno de los mayores ridiculos que se le recuerdan. Que desastre de portero Madre de Dios... Eso sí, muy acorde con una defensa que se quedo en Berna a ver el campeonato por la TV.
Sólo al inicio del segundo periodo pareció que los suizos podían plantar cara, y es que en esos instantes se vio su mejor juego, fruto del cual remontarian el partido, pero sólo un espejismo, entre el portero Fukufuji y la defensa suiza se formó un cóctel mortal que acabo por derrumbar la resistencia helvética. Muy crudo lo tienen los suizos para avanzar más allá de la liguilla.
Con esta defensa no vamos a ningun sitio. Empezamos el partido como un ciclon y a los 5 minutos ya habíamos abierto una brecha de dos goles, pero pronto se vio que no iba a ser el dia de Suiza. LA defensa volvió a desaparecer el partido y los letones remontaron en el segundo periodo. A partir de ahi fue un querer y no poder, cuando los suizos acortaban distancias, Letonia volvia a aumentar diferencias en la jugada siguiente.
Nos espera un torneo desesperante, pero aun así no perdemos la esperanza de llegar a playoffs.