1º partido ante Lakers: Muy mal partido por parte de ambos conjuntos, nadie estaba fino, las estrellas no aparecían (o si lo hacían era con cuentagotas para volver a desaparecer minutos más tarde) y eso se vio reflejado en el marcador. Cualquiera podría haberse llevado el encuentro, pero aprovechando las escasas rachas de anotación que sucedieron en el partido, conseguimos llevarnos el gato al agua. Partido para olvidar.
2º partido ante Bulls: El primer cuarto estubo muy reñido, pero a partir de ahi los Bulls se desinflaron y jugaron con precipitación y nerviosismo. Conseguimos sacar una diferencia suficiente como para jugar la segunda mitad del partido con la calma necesaria.
Lo más positivo fue el acierto en la zona de ataque del equipo. Nada que ver con el partido contra los Lakers.