Nos presionan desde abajo ¿Puede estar naciendo una hermosa amistad entre los managers de Minnesota y Atlanta? No será en la pista, donde ambos conjuntos se tenían bastante ganas después de unas declaraciones de la supuesta estrella
Ben Gordon de Timberwolves. Y digo supuesta, porque se apagó en este partido. Tira y tira, pero realmente no crea peligro. Ya que nos hemos aprendido que si pasa el balón por sus manos, irá directo hacia el aro.
Deben trabajar un poco más su libro de jugadas e incidir en la zona, donde por suerte se dieron cuenta demasiado tarde que nos podían hacer mucha pupa con ese factor. O pedir más bloqueos o dos contra uno pueden ser claves y dejarse de artimañas de sus árbitros (en este partido cambiaron de bando y por más palos que dimos en la zona nadie pitó nada) o pretender entretener al manager de Atlanta presentándole a su familia.
George Hill tiro muy bien del carro junto a
Kevin Durant, peligro constante.
Richard Hamilton no estuvo muy motivado como nos tiene acostumbrados contra su ex-manager.
En el partido contra Denver, defensivo a muerte por ambos conjuntos.
Kevin Durant nos salvó los muebles, siendo importantísima la aportación de nuestros suplentes (con
Matt Bonner y
Peja Stojakovic) desatascando nuestro ataque en momentos clave. Dominamos el marcador casi todo el encuentro sí, pero no nos fuimos realmente en ningún momento. De heho, al final los Nuggets pudieron empatar el partido sobre la bocina con Roy solo desde tres en una esquinita. Pero el tiro dio en el canto del tablero.
A destacar el horrible partido de Richard Hamilton, primera valoración negativa de la temporada. Aunque en defensa se pegó a Roy como una lapa y eso no se ve reflejado en las estadísticas pero fue esencial. Es un jugador que nos equilibra tanto en defensa como en ataque, ahora mismo es intransferible y le damos todos los ánimos del mundo para que se le pase esta mala racha.
Me lo pasé genial contra vosotros dos. Espero la vuelta!